¿Qué es un monumento? No es historia, es una obra del capricho político que homenajea sus intereses. Es más propaganda que patrimonio. El monumento es un acto reflejo del poder: se impone sin preguntar y es destruido sin pedir permiso. ¿Cómo podemos desmonumentalizar y reconquistar los espacios públicos? ¿Cómo participa la ciudadanía en la construcción de sus propios símbolos? Ante la reconstrucción conservadora del pasado “sin complejos”, surge la construcción progresista de una mirada “sin complejos”. Lo que mañana será memoria hoy es conflicto, así que cómo vamos a llegar a un consenso para retratar quiénes somos y qué nos representa.
Charla-Coloquio
Sábado 12 de Noviembre
Librería Gil 12:30h